16.2.13

LA CUARTA CAPA DEL CAMPO ENERGÉTICO HUMANO: EL CUERPO ASTRAL


Introducción

Muy apropiado; en este mes del amor y amistad, enfocar nuestra atención en la cuarta capa del aura humana, porque es la que se encuentra relacionada en forma más directa con el chacra del corazón.

Como se ha reiterado, el campo energético humano (CEH) está conformado por siete capas. Las tres primeras capas del CEH se encuentran aterrizadas en el Yo y son por así decirlo "terrenas" por eso se les denomina también las "auras de la salud" ya que por su estructura y fisiología nos dicen mucho sobre el nivel de salud de una persona.

La primera capa se relaciona con las sensaciones físicas asociadas directamente al cuerpo en su parte física: placer, dolor y comodidad física; la segunda capa atiende al cómo nos sentimos con nosotros mismos: auto emociones y auto sentimientos y  la tercera se asocia con la armonía entre la llamada lucidez de nuestras conductas y los procesos mentales.

Imagen  descriptiva de un viaje astral

En cambio, como veremos, la cuarta capa o cuerpo astral, es la frontera entre esas tres capas y las otras tres (patrón etéreo, celestial y patrón cetérico) que se corresponden con aspectos de orden superior o de la personalidad superior[1] . El cuerpo astral se manifiesta no solamente cuando se está en vigilia, sino también cuando se duerme, cuando se hacen ciertos tipos de meditación e incluso en la muerte.

Este artículo se restringirá a aspectos del cuerpo astral que se corresponde solamente al estado de vigilia.

Sobre el yo-tu del cuerpo astral


Astral es una palabra sinónimo de estelar (estela, estrellas). 


A la cuarta capa del CEH tal vez se le llama así, nos sólo por su peculiar apariencia luminosa que puede adquirir múltiples colores dentro del espectro del arcoíris, sino también, porque se extiende hacia afuera mediante ráfagas o haces de luz que semejan una estela, por las que se conecta (la más de las veces sin percatarnos)  con las de otras personas y cosas, configurando así un mundo de percepciones que escapan del mundo de los sentidos.    

Interacción con la capa astral
Acaso alguna vez has percibido que alguien, que ni siquiera conoces, te cae antipático no más al acercarse a ti, o todo lo contrario, te parece que se conocen de toda la vida. Probablemente has escuchado que entre personas que comparten una actividad como la música se generan interacciones energéticas entre ellos que algunos materializan como hermosas ondas de colores. Es probable también que hayas escuchado al decir coloquial de la gente, "esos andan en una nube" cuando ven a dos enamorados ensimismados, lo cual no es más que sin darse cuenta se ha percibido la interacción entre esos dos campos astrales. 

Entre la gente se producen numerosas interacciones a nivel astral. Grandes manchas de color de formas diversas atraviesan raudas la habitación pasando entre las personas que se hallen en ella. Algunas de estas manchas pueden ser agradables, otras no. Se puede sentir la diferencia. Es posible que el lector se sienta incómodo por una persona que se encuentra al otro lado de la habitación y que, aparentemente, ni siquiera ha advertido su presencia. (Brennan, 2008, p. 114)

De manera que este cuarto nivel del CEH sirve de vehículo para las sensaciones “hacia el alter” a través del deseo, afecto, devoción y del amor. Es la capa de las interacciones humanas con el entorno; es decir, Yo y las otras personas, Yo y los otros seres animados (plantas, animales), Yo y el planeta. (Brennan, 1994).  

Pero esas interacciones también aplican al Yo y las cosas u objetos inanimados:

Los pensamientos y sentimientos de una persona no sólo influyen en ella y en otras personas, sino que también impregnan a los objetos inanimados que la rodean, como así también a las paredes y al mobiliario. La persona magnetiza inconscientemente dichos objetos físicos, de modo que éstos tienen el poder de sugerir pensamientos y sentimientos similares a otras personas, dentro del alcance de su influencia. (Powell, 1927, p.43)


Esa conexión con todo lo que nos rodea es holográfica, lo cual hace que este campo del aura humana sea de vital importancia cuando de enfermedades y sanación de las mismas se trate por su interpenetración e interrelación con las tres primeras capas del CEH. Las relaciones (Yo-alter) afectan la salud de la misma manera que lo hace una mala alimentación. Para ahondar sobre las relación entre el binomio interrelaciones y salud, le recomendamos leer los capítulos  13, 14 y 15 del segundo libro de Barbara Brennan (1994)


El astral impide que seamos un "Yo bruto"

Una segunda función del nivel astral es servir como enlace catalizador entre los tres niveles o capas inferiores con las tres superiores. Como ya se dijo, se identifica el cuerpo astral con el chacra del corazón o Anahata precisamente porque el Anahata es el centro del amor y la frontera entre las tres capas aurales inferiores o terrenas (1ra, 2da y 3ra) y las capas superiores  o espirituales (5ta, 6ta y 7ma) últimas que se  identifican con el mundo espiritual, el mundo de la personalidad superior.

Dicho de otro modo, el campo astral interconecta los tres niveles del mundo terreno con los tres niveles más elevados asociados a la experiencia física, emocional y mental pero del mundo espiritual matizado por la fuerza del amor. Así lo expone Arthur Poweel en su libro dedicado al cuerpo astral, cuando indica que  “…sirve como puente y medio de transmisión entre el cerebro físico y la mente, la cual actúa en un vehículo de orden superior”. (1927, p.6).  

En forma sencilla, si no existiera este enlace catalizador todos nos comportaríamos con base a los  planos físicos, es decir, llevaríamos una vida instintiva, de actos involuntarios, satisfacción de  apetitos, bajas pasiones. Seriamos una especie de “Yo bruto” al relacionarnos. Pero esta cuarta capa permite el dominio de la mente para un actuar relacional consciente, nos ayuda a equilibrar las maneras negativas en que usamos la mente durante nuestra vida, mediante la incorporación del ejercicio de las cualidades superiores: el amor, la bondad, la tolerancia, el respecto, entre otros.  Con lo cual nos hacemos mejores seres humanos.  


Anatomía del cuerpo Astral


El tamaño, sutileza, color, movimiento y localización de los colores, que pueden ser percibidos por personas con elevada percepción extrasensorial, son indicativos de los sentimientos, pasiones y emociones del momento.

La extensión y grado de "sutileza" del campo astral dependerá de cuánto nos acerquemos a alejemos de ese "yo bruto". Mientras más cerca se esté a ese Yo, menos extensa, menos delineada y más espesa, a medida que nos alejemos se hace más sutil, bien contorneada y de más amplitud.

En cuanto a los colores de cuerpo astral se mencionarán algunos a manera ilustrativa, pero entre esos colores pueden encontrarse diferentes tonalidades, combinaciones de colores y distintos grado de brillantez, que en su conjunto darán cuenta del nivel y los tipos del sentimiento, emoción o de la pasión. [2] Por ejemplo: el rojo está asociado a la ira y a la furia; el naranja indica que se está en proceso de sanación o que hay dotes de sanador; el amarillo se encuentra cuando hay una fuerte actividad intelectual, sus variaciones en tonalidad denotan las diferentes áreas en que se desempeña ese intelecto; El verde es indicativo de adaptación a cambios que están operando o se van a dar en un futuro muy próximo; el rosado es el del amor;  el azul se relaciona con la creatividad o la devoción espiritual; violeta indica facultades psíquicas y espirituales elevadas. (Proyectopv.org, 2012, Brennan, 1994; Powell, 1927)

Animación de las vibraciones del campo astral


En fin, se debe indicar que el cuerpo astral mantiene una anatomía característica o "normal"  según la persona y el momento por el que vive, pero un cambo repentino de emoción hace que vibre inmediatamente todo el campo y, dependiendo de la fuerza de la misma, hace que cambie momentáneamente esa anatomía "normal" y el color correspondiente a ese repentino sentimiento o pasión se haga dominante en dicha capa. Caso típico sucede con un acceso de ira en que el color rojo manifiesto de esta pasión puede afectar todo el campo energético.  De manera que siempre es útil tener una impresión de la anatomía "normal" del cuerpo astral de la persona so pena de equivocarse y hacer un diagnóstico errado de la misma.  

El cuerpo astral da para más

Lo que pasa en los sueños astrales
Quedan cosas pendientes sobre el cuerpo astral, pero se han obviado ex profeso, porque son más complejas y su tratamiento requiere una disertación más larga y documentada, lo cual no es hacedero en estos cortos artículos de mi blogs, además que su uso entraña adquirir ciertas facultades, pericias y cuidados especiales que en sus aplicaciones requieren experticia  y muchas veces la ayuda de un guía experto. Me refiero asuntos tales como: los viajes astrales voluntarios e involuntarios, la actividad de la capa astral cuando dormimos, los viajes astrales durante el sueño, cuerpo astral y otras entidades y, por último, cuerpo astral y muerte.  

Referencias bibliográficas

Brennan, B (1994).  Hágase la luz. Manos que curan 2. Libergraff. S.A: España.

Gómez, P (2011). Manual Reiki Usui Tibetano Nivel I. Autor: Caracas

Powell, A (1927). El cuerpo Astral. Colección Teosofía. Consultado en diciembre del 2012 de la Web:
http://api.ning.com/files/henChGEBb-SOggeVI1G2SFS6Tq43wAW14wUvW7XzUBOA9NhOmjdlT8mAgZEc-MKYQxvjbf-l6PzdiI6tBjv*hksX7AmOiXdz/PowellArthurElCuerpoAstral.PDF

Proyectopv.org. (2012). El cuerpo astral y otros fenómenos celestiales. Consultado en diciembre del 2012 de la Web:
1http://www.proyectopv.org/1-verdad/117marcosesoterismocast.html

(Radiestesia.com. 2013). El cuerpo aural. Consultado en enero del 2013 del sitio Web: http://www.concienciadeser.es/radiestesia/principal.html

Imágenes bajadas de los siguientes sitios:


Auras interactuando







[1] Gómez, P (2011). Manual Reiki Usui Tibetano Nivel I. Autor: Caracas
[2] Hay que tomar en cuenta que los diferentes colores y matices tiene que ver con que las emociones, sentimientos y pasiones del ser humanos se encuentran  mezcladas.