4.5.13

EL PATRÓN ETÉREO. UNA DE LAS TRES CAPAS DE ORDEN SUPERIOR DEL AURA HUMANA


Preámbulo

En artículos precedentes hemos conversado, por separado, sobre las cuatro primeras capas del campo energético humano (CEH). Hemos comentado sobre como la primera capa se relaciona con la fisiología del cuerpo humano, la segunda con el aspecto emocional, la tercera con la parte mental o  pensamiento.  En el último post se presentó la cuarta capa, que está asociada con el chacra del corazón (Anahata), la cual marca el puente entre nuestro yo físico y las energías superiores, de manera que todo lo que fluye de las tres primeras y tres últimas capas pasan por esa membrana de difusión que es las cuarta capa.

En efecto, se comentó, que el cuarto nivel del CEH sirve de vehículo para las sensaciones “hacia el alter” a través del deseo, afecto, devoción y del amor. Es la capa de nuestras interacciones con todos los aspectos del entorno; es decir, Yo y las otras personas, Yo y los otros seres animados (plantas, animales), Yo y el planeta, Yo y los objetos inanimados. (Powell, 1927; Brennan, 1994). Pero también se expuso que la cuarta capa conecta a las tres inferiores del ámbito terrenal, con las tres superiores pertenecientes al mundo espiritual. Gracias a esa conexión mediada por el chacra del corazón, somos capaces de ejercitar cualidades superiores como: el amor, la bondad, la tolerancia, el respeto, la compasión, entre otras y eso es lo que permite que nos hagamos mejores seres humanos y evitemos ser un mero “Yo bruto”.

Nos corresponde ahora tratar, en tres artículo sucesivos, sobre las tres capas superiores, mismas que marcan una realidad atinente a nuestras necesidades en un plano superior: la voluntad divina, el amor incondicional y la mente o conocimiento divino.


El de hoy lo dedicamos a la quinta capa, que es de nuestra conexión con el Plan Divino, ese plan para y por el cual estamos en esta vida.

Tenemos un doble muy particular

La quinta capa es denominada el doble etérico, porque contiene, tal como un molde, la forma del cuerpo humano de que se trate. Una forma sencilla de poder entenderlo es imaginándolo como un gemelo del cuerpo físico denso, pero nebuloso e inverso, porque su perspectiva es tal como si nos viéramos en un espejo o como el negativo de una película. Ese doble se conecta con el cuerpo físico mediante un cordón compuesto de materia etérica. Es de apariencia gaseosa y de color gris azulado.
Ilustración del denso y el etérico


Dios dentro de nosotros

El doble etérico es también el nivel o capa que tiene que ver con la voluntad divina en el aquí; es decir, la voluntad divina en el mundo físico. En este nivel del CEH se opera la conexión entre el cerebro y la conciencia superior, es decir, la de Dios. Esa voluntad que existe dentro y fuera de uno y marca el por qué de nuestras interrelaciones.

Cuando actuamos con la verdad suprema en nuestras interrelaciones, se dan los diferentes procesos de aprendizaje, que es una guía para lo que realmente vinimos e este mundo. Cuando actuamos en concordancia con esa voluntad divina, nuestra razón se torna verdad y esa verdad, siguiendo el camino trascendente, se torna en madurez y sabiduría. Nos hemos llenado de fe, de desapego, nos separamos del ego. (Brennan, 1994)
Abrirse a la voluntad Divina

La mayor parte del tiempo uno cree que esa voluntad divina es externa y como consecuencia, buscamos ansiosos que alguien nos diga qué debemos hacer o nos empecinamos en querer averiguar el por qué de todas las cosas.  Pero también sucede que nos han imbuido de imágenes negativas acerca de la voluntad de Dios. Si no cumplimos la voluntad de Dios estamos en pecado, no puedo hacer nada por cambiar la situación porque es la voluntad de Dios, el tiempo de Dios es perfecto y con  eso explicamos cualquier cosa por abominable que sea.

Pues la realidad es que la voluntad de Dios está dentro de cada uno, no es externa. Así como el odio, el temor y el amor son intrínsecos y no extrínsecos, la voluntad de Dios es "…el más que el > o el . Se basa en la responsabilidad más que en la culpa (…) en la libertad más que en el control de los demás…"(Brennan, 1994, p. 284)  


Relación entre el doble etérico y el cuerpo físico denso

Realmente el doble etérico es un vehículo de Prana o Energía Vital del cuerpo denso. Bajo ciertas circunstancias se puede separar del denso “… por accidente, por muerte, con anestésicos tales como éter o gas, o por mesmerismo…"  (Powell, 1925, p. 5).  Al separarse, ambas capas quedan conectadas mediante un cordón energético que transmite la energía vital, de manera que cuando se separan el doble y el denso, se produce una disminución de la vitalidad.  En el caso de la anestesia y  desmayos el doble etérico queda envuelto en el cuerpo astral, pero igual hay una pérdida del prana y esto es lo que explica que luego de despertar nos se tenga conciencia de lo ocurrido. Por el contrario, cuando la separación ocurre por fallecimiento desaparece inmediatamente el cordón energético que conecta a ambas capas del CEH.

Ocurre también, que al ser una plantilla del cuerpo físico, al desaparecer una parte del cuerpo queda empero su impresión etérica. Por ejemplo, "personas que han perdido un miembro por amputación se quejan, a veces, de dolores en las extremidades del miembro amputado (…) en el lugar en que el miembro estaba. Esto se debe a que la porción etérica del miembro no se ha desprendido de la porción física densa, sino que todavía se encuentra allí (…). De manera que (…) puede haber sensación en el miembro etérico y transmitirla a la conciencia (Powell, Op. Cit., P6) y por eso se siente dolor, picazón u otra sensación tal como si el miembro estuviera ahí.

 La salud y el doble etérico

Hay una relación recíproca entre todas las capas inferiores y el cuerpo físico. El cuerpo físico se deteriora más rápidamente y se enferma, por el estilo de vida, pero también sabemos que hay dolencias a nivel del cuerpo físico que pueden ser ocasionadas por perturbaciones en las otras capas; a saber: mental, emocional y astral.

Como hemos advertido, el doble etéreo es una imagen energética perfecta e inversa del cuerpo físico, de manera que cualquier dolencia en el cuerpo se evidencian en el doble etérico.

Es tan íntima la conexión entre los cuerpos etérico y denso, que también se da la reacción inversa, de forma que, un daño infligido al Doble Etérico aparecerá como una lesión en el denso; "...es éste un caso del curioso fenómeno de repercusión. Es bien sabido que tal repercusión puede ocurrir también en el caso del cuerpo astral; bajo ciertas circunstancias un daño a este último se reproduce en el cuerpo físico." (Powell, 1925)

De acuerdo a lo anterior, si curamos el Doble, curamos el denso y también beneficiamos a los otros cuerpos.
Aplicación de Reiki

Al ser el Etéreo “Fuerza Vital” o “Prana, la curación se realiza mediante el aporte de la misma a través de la canalización energética con base a la terapéutica y técnicas aportadas por el  Reiki. Esta práctica abarca desde la simple canalización para armonizar los cuerpos energéticamente, hasta el uso de la visualización sana de los órganos y partes enfermas y las cirugías astrales. El guante Reiki, el Boysen Reiki Ho, alisado de aura,  átomo Reiki, se cuentan entre ellas. (Gómez, 2011)

Con la visualización se pueden advertir los focos de materia etérea enferma, o atascadas en las diferentes partes del doble (órganos, miembros, sistemas, etc.) y trabajarlos energéticamente o con cirugías astrales. Para esto es muy conveniente que el terapeuta Reiki tenga buenos conocimientos de anatomía y fisiología humana y obviamente que desarrolle su capacidad de percepción ampliada.

Muy importante es que el Reikista sea una persona sana desde todos los puntos de vista, por eso la práctica diaria de los principios Reiki, las meditaciones y las auto-sanaciones son herramientas que los reikistas debemos utilizar sistemáticamente.

Por último no hay que descuidar el cuidado y limpieza constantes de las manos, pero especialmente antes y después de las canalizaciones energéticas. Esto es especialmente importante cuando se eliminan impurezas y atascos del Doble Etérico. Se pueden sacudir las manos fuertemente, hacia la tierra y fuera de uno una vez finalizado, o bien lavarse las manos bajo el chorro en el lavamanos, algunos reikistas realizan lavado energético imaginando una luz limpiadora en las manos a la vez que las frotan y sacuden hacia abajo.

Para alinear tu Doble

Repite esta oración todos los días:
Son
“Afirmaciones para alinearse con la voluntad divina: Me comprometo con la voluntad de Dios. Entrego el corazón y el alma a Dios. Merezco lo mejor de la vida. Sirvo a la mejor causa en la vida. Soy una manifestación divina de Dios (Brennan, 1994, p.284)

Namasté

**********


Referencias Bibliográficas

Brennan, B (1994).  Hágase la luz. Manos que curan 2. Libergraff. S.A: España.

Gómez, P (2011). Manual reiki Usui Tibetano: Nivel I. Autor: Caracas.
Powell. A (1925). The Etheric Double: The Health Aura of Man. Colección Teosofía. Consultado en abril del 2013 de sitio Web





3. http://lujan.olx.com.ar/sesiones-de-reiki-armonizacion-de-chakras-y-limpieza-energetica-iid-474352188